A pesar de mi silencio bloguero, no he parado de tejer.
Este año no me voy a proponer los proyectos que tejeré a lo largo del mismo. Intentaré ser más espontánea y según vaya terminando un proyecto miraré lo que me gusta y continuaré con uno nuevo. De esta manera no me decepcionaré al ver que lo que me propuesto a lo largo de 12 meses, no ha sido posible.
En mis agujas por el momento tengo dos proyectos, ambos son chales.
Uno es Haruni Shawl de Emily Ross. Creo que lo empecé a tejer entre el año 2009 y 2011, el caso es que cuando terminé el patrón A me parecía muy pequeño, por mi forma de tejer, apretadito, así que hice más repeticiones. Hice tantas que cuando lo cuadré para comenzar el patrón B me quedé sin hilo. Escribí a dónde había comprado la lana y me comentaron que tristemente no tenían la misma tintada. Tal fue mi desilusión que se convirtió en un UFO.
Pero este año buscando en mi caja de lana, me tropecé con él y pensé "¿qué puedo hacer contigo?".
Pues hice lo más sensato para mí, lo deshice. Y para no aburrirme haciendo lo mismo de nuevo estoy tejiendo la versión mediana y le he añadido unas seed beads. Había visto este chal con cuentas en Ravelry concretamente a Kessalin y me encantó.
El otro chal es My Heaven Shawl de Patusha. Lo estoy tejiendo con mohair y seda. El chal de por sí es una preciosidad pero con este tipo de lana queda muy bonito.